Se plantea como primer objetivo incorporar al INN a las políticas del gobierno que en ese momento llevaba 6 años de gestión y fue reelecto para un período igual. El diagnóstico que se hizo inicialmente fue que la institución, además de ser un antiguo organismo, con un perfil laboral relacionado con sus viejas funciones de atención de servicios de alimentación, las cuales ya no eran pertinentes en ese momento, en los 6 años de gestión del nuevo gobierno, no se había identificado con las nuevas políticas nacionales que este impulsaba.
Su primer planteamiento fue abrirse a las comunidades y a la opinión pública como una institución identificada con las políticas alimentarias del nuevo gobierno, considerando al poder popular como factor fundamental para el impulso de esas políticas. El Proyecto Nutrición Para la Vida (NPV), que se había formulado antes de su nombramiento, con un ámbito comunitario muy fuerte, fue el que marcó el inicio de la gestión. “contigo en la calle nutriendo conciencias” fue el lema de la gestión.
Esta iniciativa produjo un impacto inmediato en la imagen del Instituto que comenzó a hacerse más visible y cercano a la Revolución Bolivariana, proyecto político del cual es expresión el actual gobierno.
Habían ocurrido en el gobierno dos hechos trascendentales para la institución. Por una parte los más de 400 comedores escolares que manejaba el Instituto y que era su mayor responsabilidad en atención alimentaria, habían sido transferidos en 2003 al Ministerio de Educación y por otra el gobierno había creado el Ministerio de Alimentación (MINAL), nueva institución encargada de la distribución de alimentos a la población, que entre otros servicios tiene hoy más de 6.000 casas comunitarias de alimentación que es una cifra enorme con respecto a las 300 que atiende el INN.
El planteamiento del nuevo equipo de gestión fue claro:
• No nos corresponde administrar una institución ya transformada
• Nuestro desafío es la creación de una nueva institución integrada con el resto de la institucionalidad surgida en el proceso bolivariano para alcanzar la soberanía y seguridad alimentaria y nutricional
• No corresponde al INN la atención directa de servicios de alimentación a la población porque para eso fue creada una nueva institucionalidad
El viraje político planteado por el equipo directivo no era fácil. Estaban ante una institución que desde los años 40 se dedicaba principalmente a la atención de comedores y su personal estaba en su mayor parte orientado técnica y políticamente a ello, además que la estructura del presupuesto de la institución, deficitario por lo demás, estaba y sigue estando sesgado hacia esta función.
Simultáneamente a la presencia en la calle, en las comunidades y en los medios de comunicación con un perfil más educativo y orientador hacia lo que la población debía comer para estar mejor alimentado, el equipo se trazó una estrategia de relación con los organismos gubernamentales nacionales encargados de las políticas agroalimentarias del país, a fin de contribuir a esas políticas aportando el conocimiento nutricional, que es monopolio técnico del INN en la estructura del Estado venezolano.
Al terminar el primer año de gestión ya había una definición más clara de los lineamientos fundamentales, sintetizados en 3 Estrategias: Cultura nutricional, Monitoreo e investigación y redes nutricionales. El propósito fundamental fue convertir al INN en un ente rector y asesor del Estado en la formulación, ejecución y monitoreo de las políticas alimentarias y nutricionales del país e incidir en la formación de una nueva cultura nutricional de los venezolanos, basada en hábitos alimentarios que garanticen la seguridad y soberanía alimentaria y nutricional.
Los logros:
Relaciones Políticas
La relación con el Ministerio de Salud, que es su área de adscripción, ha sido de mucho respeto y disciplina hacia las máximas autoridades todo el tiempo, siguiendo disciplinadamente los lineamientos que han venido dictando las distintas autoridades del Ministerio en este período. Sin embargo, la actividad del nuevo INN que, según sus lideresas, quiere enfatizarse en la labor educativa y relativa a la política alimentaria en función de una buena nutrición pública, se realiza fundamentalmente fuera del ámbito de influencia de ese Ministerio, por lo cual la interrelación con otros sectores del ámbito público es fundamental.
El trabajo técnico con el sector salud se ha expresado principalmente en asesoría a todo lo referido a servicios de alimentación y nutrición de la red de servicios de salud, recolección de datos básicos para estadísticas nutricionales en la red de atención primaria de salud y apoyo nutricional a las personas que lo requieren en este primer nivel de atención, además de la red propia del INN de recuperación y educación nutricional (SERN) que atiende niños y niñas con déficit nutricional y que está estrechamente relacionada con la red hospitalaria nacional.
El equipo directivo ha tenido una excelente capacidad de conducción política, con mucha asertividad gerencial, audacia y alto sentido de la oportunidad en la acción política y comunicacional, además de una alta formación técnica en el área. Ha logrado convertir al INN en un ente que, a pesar de su debilidad institucional estructural, se ha hecho presente y visible en las políticas agroalimentarias del país en este período.
El instituto se ha incorporado con entusiasmo la gestión gubernamental actual, como nunca antes y comenzó un viraje interesante desde el campo de la atención de servicios de alimentación, al campo agroalimentario, donde se ha logrado un posicionamiento político modesto, pero de alta relevancia en la formulación y ejecución de las políticas para la alimentación y nutrición de la población venezolana.
Esto se expresa en una estrecha relación e iniciativas conjuntas con los ministerios de Agricultura y Tierras, Comercio, Alimentación y Vice Presidencia Ejecutiva de la República, además de organismos rectores de políticas educativas (Ministerio de Educación), comunicacionales (MINCI) y de estadísticas nacionales (INE), entre otras. El propio Presidente de la República ha identificado ese cambio y ha reconocido en varios escenarios el trabajo realizado por el INN
Educativos y comunicacionales
En el campo educativo y comunicacional ha habido avances notables. La relación con los organismos encargados de las políticas educativas y comunicacionales del país, se ha fortalecido y la presencia del INN en escenarios de transmisión de conocimientos y orientaciones nutricionales institucionales y comunitarios, se ha incrementado notablemente.
Es importante destacar la relación con el Ministerio de Educación que ha permitido ir incorporando los contenidos nutricionales a la educación formal a través del curriculum para educación básica.
En este mismo orden de ideas y como estrategia comunicacional fundamental, se ha creado un nuevo icono nacional para los grupos básicos de alimentos, el trompo de los alimentos, que ha sustituido con éxito la vieja pirámide de los alimentos que no tiene nada que ver con nuestra realidad cultural.
Al respecto reseñamos la visión de una profesional de la nutrición de dilatada trayectoria en la institución que relata de manera detallada el antes y después de la institución en materia educativa:
EVOLUCION DE LA DIRECCION DE EDUCACIÓN COMO PARTE DE LOS LOGROS ALCANZADOS EN ESTA GESTIÓN:
INTRODUCCIÓN
Es por todos y todas conocido que el Instituto Nacional de Nutrición, dada la trayectoria que venía proyectando en los gobiernos de la cuarta república, reunía todo un perfil que lo mostraba como una institución asistencialista con un bajo perfil técnico, sin una visión de país, que lo fue aislando del contexto nacional, llegando incluso a plantearse su cierre inminente. Como consecuencia de este proceso degenerativo, para el año 1999, se estableció un plan de formación de cooperativas dirigido a los trabajadores y trabajadoras del INN, como una manera de que invirtieran sus prestaciones sociales, una vez que estuviesen fuera de la institución. El INN estaba inactivo, con una imagen deteriorada, sobre todo a los ojos de las comunidades y ante la población en general, varios aspectos contribuían a reforzar este punto:
Rol asistencialista, con bajo perfil técnico: las gestiones se centraban en los programas dirigidos a la entrega de alimentos, sin ninguna otra connotación o enfoque social.
Los aspectos técnicos desarrollados tenían poca o ninguna trascendencia o beneficio de alcance a lo cotidiano de las comunidades.
Escaso o nulo trabajo comunitario.
Falta de vinculación de lo nutricional con otros contextos o áreas: agrícola, social, cultural y comercialización de alimentos
Papel nulo en el ejercicio del rol rector de las políticas nutricionales.
RESCATE DEL ROL RECTOR DE LAS POLÍTICAS NUTRICIONALES:
Ha correspondido a la presente gestión trabajar en función de recuperar el rol de rectoría del Instituto Nacional de Nutrición, en todas sus áreas de acción y el rescate de su imagen. En este sentido se han venido desarrollando estrategias, para dar un viraje a la visión de nuestra institución, dándole un enfoque social, respondiendo a la frase “Nutriendo Conciencias”.
A continuación se mencionan parte de esas iniciativas que se vienen trabajando:
Cooperación técnica inter-institucional. El desarrollo de una estrategia de convenios conjuntos con otras instituciones del Estado relacionadas con el aspecto multidisciplinario de la nutrición, es de destacar que estas alianzas han demostrado la calificación técnica del INN y han permitido potenciar los proyectos que lleva el Estado Venezolano en el área alimentaria. Hoy el INN, especialmente la Dirección de Educación está presente con el componente de Educación Nutricional de programas como la “Arepera Socialista” y “Abastos Bicentenarios”, entre otros.
Conformación de equipos multidisciplinarios, que conjuntamente con las y los nutricionistas realicen un análisis integral del aspecto nutricional, desde el punto de vista social, cultural, biológico, de la salud y antropológico. En este aspecto se han fortalecido los equipos, con personal técnico calificado, que permita encarar los procesos creativos y de cambio que ha sido necesario implementar, para darle una nueva proyección a la institución y enfrentar el reto de transferir los conocimientos a las comunidades. En este sentido la Dirección de Educación cuenta en la actualidad con especialistas en comunicación social, educación y diagramación de materiales educativos. Este fortalecimiento de los equipos humanos ha permitido trascender el tema técnico de la nutrición con estrategias pedagógicas-comunicacionales a la cotidianidad de la población, enfocándolas a sus características y necesidades. Así tenemos proyectos como Waikú...Todos a Bordo., una experiencia en la cual lo nutricional es abordado desde lo cultural, histórico, geográfico y social, entre otros aspectos.
- Creación de nuevos conceptos e iconos como el “Trompo de los Alimentos”, que promueven la política de promoción de nuestra soberanía y cultura alimentaria, dándole una orientación fundamental a los procesos educativos que venimos desarrollando.
• También es importante destacar los procesos de elaboración de nuevos materiales educativos como los “cuadernillos” dirigidos a los y las docentes. Otro punto importante es la nueva imagen que ofrecen los materiales educativos, con sus colores y calidad en el diseño, lo cual constituye un estímulo a la lectura y una forma de transmitir al lector la valoración que tienen para la institución.
• La implementación de estrategias lúdicas novedosas basadas en la nutrición como eje temático: se ha venido trabajando con los títeres como un apoyo importante para afianzar los procesos educativos en la población infantil, conocida su valoración como arte escénica que mueve parte del mundo emotivo y sensibilidad de las audiencias, facilitando de manera significativa los aprendizajes de una manera integral.
• Presencia en las comunidades de una manera directa. El contar con una logística de transporte y de apoyo ha permitido estar presente en las comunidades, acompañando operativos interinstitucionales y consolidando los procesos de formación de brigadistas, promotores y otras figuras de las comunidades que están actualmente ejerciendo el rol de contraloría social en nutrición, aprendiendo en su quehacer diario en su vivencia y llevando lo aprendido a sus contextos de vida…
• Humanización del ambiente institucional y rescate de los espacios.
• Respuesta a las necesidades de atención de los hijos e hijas de los trabajadores, a través de la atención que se brinda en la Sala Maternal Negra Hipólita, iniciativa que también es coherente con las políticas de promoción de la lactancia materna y protección a los niños , niñas y la familia. Considerando además como un espacio educativo y para la investigación educativa en la población infantil.
Esta es mi pequeña visión; las nuevas generaciones no conocen a cabalidad los procesos por los que ha pasado el INN, y los cambios que ha tenido que experimentar para emprender los nuevos retos y crear una nueva imagen. No es fácil resurgir o renacer. Yo creo que el INN ha renacido, todavía nos falta muchas cosas que hacer, pero los primeros pasos, los más difíciles están dados
Estadísticas alimentarias y nutricionales:
Acá desde el antiguo Sistema de Vigilancia Alimentaria y Nutricional (SISVAN), se ha creado un área de estadísticas nutricionales que ha trabajado arduamente por hacer más pertinentes en términos de políticas públicas, las estadísticas alimentarias y nutricionales.
Este cambio ha permitido al INN estar más presentes en lo que se refiere al monitoreo de las políticas agroalimentarias del país, utilizando como herramientas la Hoja de Balance de Alimentos (HBA) (que ha sido fortalecida) y el SISVAN cuyos productos han sido mejorados y adecuados a las nuevas realidades, aunque aún requiere un fortalecimiento y transformación mayores.
Se ha avanzado en incrementar la capacidad de análisis de la situación alimentaria y perfil nutricional del país y se proyecta fortalecer esa capacidad en cada uno de los estados.
Mostramos a continuación algunos de los gráficos principales que muestran el avance de la situación nutricional del país y que han sido construidos por el INN, con base en su sistema de estadísticas alimentarias y nutricionales:
El Indice de Prevalencia de la Sub-nutrición (IPS) mide las proporción de personas que no tienen acceso a los nutrientes mínimos necesarios para sobrevivir. Es un índice global, a través del cual se miden el curso de las políticas alimentarias de un país medidos en las calorías/persona/año disponibles en comparación con los requerimientos mínimos de esa población. Con el mismo se monitorea la reducción del hambre en los países. El porcentaje ideal es que sea menor a 2,5%, para considerar a un país libre de hambre.
Como puede verse en el gráfico anterior, el país llegó a finales de los 90 a tener un IPS de 21% lo cual indicaba que 1 de cada cinco venezolanos estaba sub-nutrido. La última cifra disponible (trienio 2006-2008) es de 6%, acercándose el país a la meta del milenio que establece para 2015, reducir el IPS al menos al 50% de su valor en 1990 que fue de 11%.
El déficit global, que es el indicador de comparación internacional para medir el grado de desnutrición de niños menores de 5 años, en Venezuela es hoy de 3,2%, colocándose 50% por debajo del que tenía el país para 1990, lo cual indica que según este indicador, ya se alcanzó la meta del milenio.
Al compararnos internacionalmente, somos el 5to mejor país en materia de reducción de la desnutrición en América latina, según las últimas cifras publicadas por todos los países
Investigación
En el área de investigación se ha fortalecido tanto la investigación en alimentos como la investigación poblacional en nutrición pública. Se han transformado totalmente los laboratorios nacionales del área incorporando a ellos tecnología de última generación, hasta colocarse entre los primeros del país y se han hecho muchos estudios sobre temas nutricionales de alta relevancia como, lactancia materna, sobrepeso y obesidad, nutrición deportiva, etc.
En el área de tecnología de alimentos se ha avanzado notablemente en la formulación de nuevos alimentos basados en la producción agrícola nacional para contribuir a la soberanía alimentaria.
Se Apoya y asesora desde los laboratorios de la institución a todos los organismos de ejecutivo nacional encargados de las políticas agroalimentarias, para contribuir a su formulación, ejecución, seguimiento y evaluación.
Lo administrativo
Una parte importante de la gestión ha sido la experiencia administrativa de manejar un Instituto autónomo, con fuertes problemas laborales acumulados y déficit presupuestario crónico, lo cual ha sido atendido al máximo posible, sin sacrificar la misión de transformación que el equipo se ha planteado y ha logrado impulsar. Es decir, se ha “administrado una bodega deficitaria” sin sacrificar el objetivo de transformación política e institucional, para estar a tono y aprovechar las oportunidades que genera un momento crucial de cambios de las políticas sociales. Se ha podido demostrar que, en medio de las dificultades estructurales de la institución, algunas de difícil superación, es posible diseñar e impulsar políticas transformadoras en el campo de la alimentación y nutrición del país.
Obviamente son muchas las cosas que hay por hacer y las dificultades por superar, pero como dice la compañera citada, “los primeros pasos, los más difíciles están dados”
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